4 de agosto de 2010

¡Raúl, Raúl, siempre Raúl!

Nueve días. Nueve largos y tristes días, desde la despedida del que fuera capitán del Real Madrid.
Parece que una sombra nos este invadiendo. No encontramos la luz, no sabemos si reír o llorar, si gritar o callar. Su imagen vestido de blanco, se resiste a irse de nuestra memoria. Pero así son las cosas.

Se fue entre lágrimas. Nunca había visto esa cara de Raúl. Triste y desolado, pero a la vez ilusionado. Ilusionado, por ver una pequeña parte representativa de la afición, de los “raulistas” que fueron a despedirle. (Gracias Almita). No fue la despedida que se merecía, pero sabemos que no es un adiós, si no un hasta pronto. Eso quiero pensar.

Nos queda un duro camino. Evitar el olvido. Ahora es pronto, todos le recuerdan, todos lo nombran, pero, ¿después?
Para eso estamos nosotros, para evitar su olvido. Que los niños conozcan quien fue, que hizo y que logro. Sus aptitudes, sus actitudes.

No me imagino viendo partidos del Real Madrid y no ver a Raúl luciendo el “7”. Lo buscare, y no lo encontrare. Pero él seguirá entre todos los madridistas, entre todos los “raulistas”.

Hoy, es tiempo para decir mi discurso, palabras que con el tiempo irán creciendo y nuevas Irán naciendo.

“Gracias Raúl. Gracias por esas palabras que nos regalaste y la emoción de las mismas. Durante toda mi vida he sido madridista, pero sobre todo, “raulista”. Contigo, he crecido en lo personal y en lo deportivo. Verte jugar, reír, pelear, hablar, marcar…para mí era un aliciente más, una lección más.
Durante estos últimos dieciséis años, se, que te as estregado al Real Madrid, a sus valores y a su afición. Siempre as buscado lo mejor para este club. Eres un ejemplo, nuestro ejemplo. Jamás, podremos agradecerte todo tu esfuerzo, y todo aquello que nos as regalado.
Nunca podremos olvidar que tu fuerza ha sido nuestra fuerza, nuestro aliento. Gracias a ti, por todo y por tanto.
No olvides que el Real Madrid, ha sido y es tu casa, que nosotros hemos sido y seremos tu afición. Siempre tendrás un sitio aquí, junto a nosotros. Siempre estaremos dispuestos para lo que nos necesites.
Ahora nos queda el dolor de tu marcha y un vacío. Pero ese dolor y ese vacío, se tapan con la esperanza. La esperanza de verte regresar de donde nunca tendrías que haberte ido. Gracias Raúl.”

Vuelve pronto Capitán.


“Los viejos rockeros nunca mueren Rulo”

2 comentarios:

  1. Claro que los viejos rockeros nunca mueren. Es más, su leyenda siempre seguirá creciendo!

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  2. Gran frase para terminar! A Rulo aún le quedan muchas alegrías que dar.

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Marca un gol al más puro estilo Raúl, ¡venga, valiente!